el manifesto

Este blog nació en 2013 como resultado de mi interés por la decoración. En esa época me sentía fascinada por el interiorismo, los espacios singulares, el mobiliario vintage escandinavo, el uso de la luz, o las publicaciones especializadas, y eso me llevó a emprender el proyecto de tienda física que tuve durante 4 años. Una vez he cerrado esa etapa, ahora el blog también se transforma. Si más no, se presenta como una evolución de aquello que me inquieta actualmente pero que sigue buscando la belleza en lo sencillo, lo cotidiano. Y aunque la esencia es la misma, esta renovación va a fundamentarse en 4 conceptos.

SOSTENIBILIDAD

Hace casi 10 años que soy socia de Greenpeace y recientemente he apoyado a través del micromecenazgo el lanzamiento de la revista juvenil Pantera, una publicación pensada para un público infantil con el afán de cultivar su amor por el medioambiente. A partir de ahí, considero que para ser más sostenible, lo importante es ir haciendo pequeños gestos e incorporarlos a nuestro día a día. Recomiendo empezar por lo más básico: reciclar, reducir el consumo de envases y de plásticos de un sólo uso, utilizar menos el transporte privado e ir a pie o en bicicleta, o usar el transporte público. A veces el verdadero cambio empieza por uno mismo, y el planeta nos necesita ahora más que nunca.

VIDA CONSCIENTE

En el fondo, este concepto serviría para todo lo que se va a poder encontrar en el blog. Para mí la vida consciente empezó el día en el que me paré a leer las etiquetas de lo que compraba envasado en el supermercado, o la de las piezas de ropa. Hasta entonces lo adquiría porque me gustaba, sin preguntarme su origen o composición. Algo tan aparentemente sencillo como eso, es un primer paso para llevar una vida consciente. Ese es un camino por el que quiero ir y por eso defiendo la importancia de pararse a pensar en el por qué de las cosas, y no dejarse llevar por los impulsos o por el marketing agresivo, y muchas veces también ‘engañoso’, de las grandes marcas. El concepto ‘vida consciente’, va a estar muy relacionado con el consumo, pero también con hábitos saludables, con el cuidado personal, y con el bienestar, no sólo con uno mismo, si no también con la familia, las relaciones, en el trabajo, y en general, con el mundo que nos rodea. Uno de mis propósitos es llevar una vida más sencilla, rodeándome de lo más básico y de lo que realmente utilizo y me hace feliz.

PROPUESTAS DE OCIO

Siempre me ha gustado viajar, conocer otros lugares, alojarme en pequeños hoteles con encanto, degustar un buena comida en un restaurante donde se cuiden los detalles, vivir experiencias que me enriquezcan y me nutran. Está claro que la pandemia ha cambiado la forma de vivir nuestro ocio pero no por ello hay que seguir apoyando a este sector, no sólo adaptándonos a los protocolos actuales, si no también apostando por la oferta de proximidad o el turismo local.

INSPIRACIÓN

A veces me pregunto por qué leo otros blogs o sigo a determinadas personas en las redes sociales, o escucho este u otro poadcast, o consumo diferentes publicaciones. El principal motivo suele ser el mismo: inspirarme, y por consiguiente, alimentar mi creatividad. Alguien me dijo una vez que todo ya está inventado pero que nosotros podemos darle nuestro toque personal y convertirlo en algo único. Por eso me gusta mucho observar. Mi afición por la fotografía tiene mucho que ver en este apartado, y por eso va a ser uno de los aspectos que más voy a cuidar. La fotografía me suele invitar a soñar y ése es uno de los placeres más sanos que existen.

«No es verdad que las personas dejen de perseguir sueños porque se hacen viejas. Se hacen viejas porque dejan de perseguir sueños»

—Gabriel García Márquez